Nuestra Señora de las Rosas, María Auxilio de Madres     

1 Julio 1974 - Víspera de la Visitación de la Stma. Virgen María

 

Verónica - ... una luz azul muy pálida, un bello tono de azul.  Y ahora veo, veo una gran estrella.  Tiene tres puntos y escritas arriba de ella están las letras T-R-I-N-I-D-A-D.  "TRINIDAD."

Ahora se pone mucho más claro por el lado izquierdo del asta de la bandera.  Y veo, veo a un hombre sobre una cruz.  La cruz está casi horizontal.  Pero, no, ambos lados de la cruz tienen largas cuerdas.  Y veo que hay un hombre sobre la cruz, y la cruz está siendo halada a lo ancho y a lo largo por... Es muy extraño; la cruz está siendo halada por - puedo ver el clero, cardenales y obispos.  Ahora el hombre sobre la cruz - oh, el hombre sobre la cruz es el Santo Padre, el Papa Paulo (VI).

Ahora - oh, hay una bella luz azul que se forma justo a la derecha del asta de la bandera.  Y el mismo cielo se abre, y, es como si el mismo cielo está lleno de pequeñas nubes azules.  Y a medida que se abre, puedo ver - oh, Nuestra Señora se adelanta.  ¡Oh!  ¡Oh, Ella se ve tan bella!  Nuestra Señora está vestida con una túnica blanca, pero Ella tiene puesta una capa azul muy amplia sobre Su cabeza que llega hasta Sus pies.  Ahora Nuestra Señora tiene puesto un par de sandalias; puedo ver Sus dedos.  Las sandalias son de un color dorado pálido.  Son muy brillantes y resplandecientes, porque a medida que Nuestra Señora se adelanta ahora, la luz es muy brillante.  Es muy, muy duro para Sus ojos, es tan brillante.  Ahora Nuestra Señora se inclina.

Nuestra Señora - "Hija Mía, la escena que acabas de ver es en el presente.  Nuestro Vicario y tu Padre en la tierra está siendo crucificado por los que han prometido seguirlo en obediencia.  Entristece el corazón de todos en el Cielo observar la desobediencia de los hijos de la tierra a Nuestro Vicario.  Estas semillas de desobediencia han sido sembradas por satanás.

“Vuestro mundo está ahora en angustia; vuestro mundo está en profunda oscuridad del espíritu.  Se me ha dado este tiempo, hijos Míos, para llevaros un firme Mensaje del Cielo.  Debido a vuestras grandes abominaciones, debido a vuestro orgullo y desobediencia, debido a vuestro rechazo a vuestro Creador, el Creador del Cielo y de la tierra, será enviada sobre el mundo, vuestro mundo, una espada de gran magnitud.

“Los mofadores han volteado sus espaldas a la verdad.  Aquellos quienes ridiculizan el Mensaje del Cielo se encontrarán tristemente despertados en el futuro cercano.  Vuestro país se ha entregado a sí misma a la destrucción, vuestro país se revuelca ahora en inmundicia y abominaciones; pero sobre todo, vuestra nación tan gloriosa, la cual se le dio tanto en abundancia por el Padre, ¡ha alimentado al humano y destruido el alma!

“He prometido en el pasado, hijos Míos, protegeros.  Ya no puedo prolongar esta promesa, porque la balanza está pesadamente hacia la izquierda.  El Padre piensa castigar a los que El ama.  Los números de las almas que caen al infierno son tan numerosos y más abundantes ahora que los copos de nieve que cayeron en vuestro invierno.

“Sí, hija Mía, será enviado sobre la humanidad un gran Castigo.  La Bola de la Redención ronda cerca.  El Padre extiende Su mano.  Su Corazón late a medida que espera - Su misericordioso Corazón por vosotros.  Pero los granos de arena en el reloj de arena están pasando.

“El Espíritu de verdad, hijos Míos, ha sido enviado a vosotros un sin fin de veces en el presente y en el pasado.  Muchos Lo han rechazado, eligiendo colocarse a sí mismos sobre el camino del error y la condenación.  ¡Orgullo, orgullo intelectual en la Casa de Dios es una barrera más formidable que el total desenfreno!  ¡Esta barrera destruye!  ¡Libraos de este orgullo y arrogancia!  ¡Regresad a vuestro estado de pobreza de cuerpo y mansedumbre del alma!  ¡A menos que os hagáis como los pequeños niños, no entraréis al Reino!

“Hay sobre vuestro mundo ahora, muchos portavoces del Cielo.  He venido a vosotros, hijos Míos, en numerosos lugares y a muchas personas a través de vuestro mundo.  El Padre Me ha enviado a vosotros como una Mediadora.  Yo que conocí las tentaciones del mundo, tuve que luchar y esforzarme como hacéis vosotros, hijos Míos, porque no estoy ajena a vuestros problemas.  Pero He puesto delante de vosotros el plan para vuestra salvación.  En su libre albedrío, muchos han hecho a un lado Mis palabras, no escuchando.  Ellos se precipitan a sí mismos en engaño y en los placeres de la carne, todo de una naturaleza temporal, desechando a un lado la verdad en conocimiento que todo con vida sobre vuestra tierra tiene que llegar a un fin algún día.  Todos vosotros, como creaciones humanas del Padre, tenéis que regresar a vuestro Creador y seréis juzgados como la semilla que habéis sembrado, como ha florecido y crecido un tallo fuerte con aguas puras, un crédito para vuestro Creador, en la batalla contra satanás.  Pero, ¡no-o-o!  Muchos de vosotros os habéis vuelto débiles.  Habéis escogido ir por el camino ancho, prefiriendo los placeres de la carne y la ganancia de las cosas mundanas.  Seréis llevados de vuestra vida terrenal como la entrasteis, sin nada más que las gracias que habéis acumulado, o rechazado, en vuestra vida sobre la tierra.  ¿Estáis, hijos Míos, preparados para esto?  ¿Os habéis preparado, y a vuestros hijos?  Muchos de vosotros no estaréis... más allá de los años que esperáis.  No conocéis ni el día ni la hora.  Hay un plan en el Cielo para cada vida que el Padre ha colocado sobre la tierra.

“Vuestro mundo se ha precipitado en asesinato.  ¡NO MATAREIS!  Todos quienes se han entregado a esta lujuria y asesinato, serán enviados al abismo y sufrirán condenación eterna.  Las más abominables ofensas al Padre se han convertido en una manera de vida para muchos ahora.  ¿Qué será de vuestros hijos?  El ejemplo de muchos padres de familia es muy pobre.  Habrán muchas lágrimas derramadas sobre la tierra y mucho crujir de dientes en esos días.  Vuestro futuro, vuestro futuro preguntáis - ¡vuestro futuro es AHORA!"

EL PADRE ETERNO

Verónica - Veo - es una silla, una gran silla cubierta de terciopelo rojo.  Es - y en todo el contorno hay un adorno dorado.  Y el respaldo de la silla tiene un, un respaldo muy adornado.  Tiene una corona, una corona dorada incrustada en el respaldo de la silla.  Ahora hay un hombre sentado sobre la silla.  Oh, es un hombre que se ve muy bondadoso, pero se ve muy viejo.  Su barba es muy blanca y larga.  Sobre su cabeza hay una corona que está hecha de terciopelo rojo.  Y en la parte superior hay dos peldaños dorados, y arriba de los peldaños hay una enorme cruz.  Ahora el hombre en la silla, él se levanta - tiene un cetro, como un cetro como un bastón, casi como el cayado de un pastor, una de esas varas.  Y señala hacia el lado izquierdo del cielo.   ¡Oh!

Veo venir del cielo una enorme bola.  Viene, viene a una velocidad muy grande.  Y ahora hace calor.  Oh, oh, ¡oh!  Es una enorme bola.  Estoy muy cerca de ella ahora.  Puedo sentir el calor.  ¡Oh!  Y veo colores saliendo de la bola - amarillos y rosados pálidos.  Oh, es, es una bola de fuego.  ¡Oh!  ¡Oh!  ¡Oh!

Y ahora, oh... ¡oh!  Y ahora estoy aquí abajo y puedo ver al hombre sentado en el trono.  Se ve muy bondadoso.  Es un hombre muy viejo, de apariencia muy bondadosa.  Ahora escrito arriba de Su cabeza se forman letras en el cielo ahora en colores dorados.  Y son muy brillantes.  Y dicen: "EL PADRE ETERNO."  ¡Oh!  "EL PADRE ETERNO"  ¡Oh!

Ahora el Padre Eterno señala con Su cetro hacia el área otra vez, donde estaba la terrible bola.  Y ahora hay palabras que se forman en el cielo.  "GUERRA."  G-U-E-R-R-A.  Y debajo veo una gran explosión.  Es, es como una gran fotografía de un hongo.  ¡Oh!  ¡Oh!

Y ahora Nuestra Señora se adelanta.  Ella se ve muy triste.  Ella viene al lado izquierdo del asta de la bandera y se inclina.

Nuestra Señora - "Hija Mía, gritarás desde los tejados.  No titubes en tu Misión.  No retrocedas por la opinión del hombre.  Grítala desde los tejados, hija Mía.  Las guerras son un castigo por los pecados del hombre.  Habrá una gran guerra, hija Mía.  Oh, ¡verdaderamente, verdaderamente Soy la Madre de Dolores!  Vuestro mundo evaporará en gran humo, hija Mía."

Verónica - ¡Oh!  ¡Oh!  ¡Oh!

Nuestra Señora - "Tienes miedo, hija Mía.  No deseo darte miedo, pero debes ver lo que sobrevendrá a la humanidad muy pronto a menos que tú y otros trabajen con gran prisa para enviar el Mensaje y Advertencia del Cielo.  No debes disminuir en tu Misión, hija Mía.  Reza por la Luz y se te dará la fortaleza."

Verónica - Ahora Nuestra Señora se eleva muy alto por el asta de la bandera.  Y el cielo se abre.  Oh, puedo ver a San Miguel.  Yo reconozco a San Miguel.  El es muy grande.  El desciende, para estar contiguo a Nuestra Señora.  El cubre todo el cielo.  Nuestra Señora se ve muy pequeña a la par de San Miguel.  Y San Miguel ahora tiene una lanza en su mano derecha.

San Miguel - "Pronto, hija mía, verás la espada sumergida en sangre."

Verónica - Ahora Nuestra Señora se adelanta.

Nuestra Señora - "Hija Mía, no comprendes las palabras.  Como Mi guardián, él, también, desea advertirte que el tiempo se acorta.  La humanidad trae sobre sí una gran espada.  La penitencia será dura.  Todo el que permanece con Mi Hijo en la Luz no tendrá motivo para temer.  Ellos pasarán estos días con mucho valor, y perseverancia.

“La medida más grande de responsabilidad, hijos Míos, estará con los padres de familia - de ver que las almas de sus hijos estén cuidadas contra la contaminación.  Debéis rezar mucho en vuestros hogares para que no seáis mal guiados.  Satanás ha colocado a muchos agentes sobre el mundo.  Ellos trabajan y planean y nunca duermen - planean la destrucción del alma humana.  Reconoced las caras del mal a vuestro derredor.  Ellas no vendrán en forma o rostro reconocible.  Siendo humanos, ellos no se os aparecerán en su estado diabólico, sobrenatural.  Ellos tienen que trabajar a través de los cuerpos de hombres y mujeres, y aún, tristemente hija Mía, de niños.

“No desechéis la armadura, la armadura que se os ha dado por el Padre.  Llevaréis vuestra armadura, no como decoración, ¡sino por protección!  No os quitéis vuestra armadura al escuchar la burla de otros.  Es satanás quien los ha enviado en vuestra contra.

“Hija Mía, recuerda bien las palabras que ahora te daré.  Repítelas diariamente: cuida de una fuerza malvada que rodea un santuario de pureza.  Ellos buscarán detenerte con toda (clase) de astucia y engaño.  Escucha el aviso del Cielo y a los Arcángeles.  Ellos han sido enviados para protegerte.  Reza mucho por la Luz.  Cuida de una fuerza maligna que rodea un santuario de pureza.  Ellos tratarán de detenerte con toda (clase) de astucia y engaño.  Miguel tiene que ser regresado a la Casa de Dios.  Regresadlo o caeréis.  Una Casa en oscuridad, una Iglesia en oscuridad, lleva una banda de muerte a su derredor.  ¡Todo lo que está podrido, caerá!

“Hija Mía, estoy llena de gran desesperación."

Verónica - ¡Oh!

Nuestra Señora - "Me desespero por el número de almas que ha endurecido sus corazones y se ha entregado a satanás.  Vemos las más despreciables abominaciones sobre la tierra.  Nada está escondido al Padre.  No escaparéis de vuestro justo juicio.  Recordad, hijos Míos, a Noé, a Sodoma.  ¿Qué recibiréis ahora cuando vuestros pecados claman al Cielo por retribución?

“El Padre, hija Mía, os dio una gran postergación.  Su Corazón es todo misericordioso, no deseando que uno solo se pierda.  Pero ahora el tiempo ha llegado para separar las ovejas de las cabras.  Rezad mucho, hijos Míos.  Haced muchos actos de penitencia, sacrificio.  Muchas almas víctimas serán necesitadas en los días por venir, víctimas al amor misericordioso del Padre - aquellos quienes están dispuestos a entregarse por la repatriación de otra alma.  Dad, y todo os dará el Padre, porque realmente es, hijos Míos, que en dando, recibiréis.

“Repítelo una vez más, hija Mía, la advertencia a la humanidad: todo el que ha sido un cómplice, o ha sido prominente en los asesinatos de los no nacidos-y hace esto de libre albedrío y con conciencia - será condenado a los fuegos eternos del abismo - ¡¡el infierno!!  El asesinato está desenfrenado; la vida como ahora la conocéis, ya no es vista desde el Cielo.  Nosotros vemos al hombre como una criatura de lujuria, asesina de corazón, sin escrúpulos, acaparadora de riqueza, matando de inanición a los justos.  La espada de la destrucción reclamará a muchos.

“Prepárate, hija Mía, para una gran prueba.  No hay razón para temer, ya que el Padre cambiará todo lo malo en bueno.  Te sentarás ahora, hija Mía, hasta que Mi Hijo esté con Nosotros."  (Pausa)

Verónica - Oh, el cielo se abre.  Es tan bello.  Oh, la luz es tan brillante que lastima mis ojos.  ¡Oh!  Oh, Jesús desciende - El desciende ahora.  Ahora, delante de Sus pies, Sus pies están descalzos.  Oh, El no tiene puestas sandalias.  Oh, El piensa que eso es gracioso, pero - El no tiene puestas sandalias.  Pero Su túnica, Su túnica es muy larga.  Es solamente cuando el viento sopla que yo puedo ver Sus pies.  Ahora Jesús desciende por el lado derecho del asta de la bandera.  El sonríe.  Y ahora El toma Su capa - Jesús tiene puesta una, oh, es una capa de color borgoña, y está amarrada a Su cuello con una banda de tela de color marrón.  Es como una pieza de  cuero.  Y está amarrada a Su cuello.  Y Jesús toma la capa y la pone sobre Su brazo izquierdo.  Oh, El dice:

Jesús - "Eso, hija Mía, es para que Yo tenga mi brazo derecho libre."

Verónica - Oh, ahora Jesús se adelanta.  Y puedo ver que Nuestra Señora viene a través de las nubes.  Se forman bellos grupos de nubes azules y blancas, y parecen estar - oh, Nuestra Señora parece flotar sobre las nubes.  Y La están trayendo muy cerca ahora.  Jesús se adelanta.  Y Nuestra Señora está del lado derecho de Jesús.  Oh, ¡Ella es tan bella!  Ahora con Ella hay - oh, veo unas monjas.  Oh, reconozco las monjas.  ¡Oh!  Oh, es Santa Terecina.  Oh, es Santa Terecina y hay otras tres monjas con ella.  Oh, son sus hermanas.  Oh, sí.  Ahora se adelantan, muy cerca.  Jesús se adelanta.  El está de pie - oh, ¿se va a parar sobre el estandarte?  Oh, no. Jesús está de pie justo arriba del estandarte ahora, del lado derecho, muy cerca  a la tierra.  El mira hacia abajo.  Jesús junta Sus manos, así, y hace la señal de la cruz:  En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.  Ahora Jesús señala hacia, y El va hacia, y ve hacia abajo por el árbol.

Jesús - "No te pongas incómoda, hija Mía.  No es necesario abrir tu cartera.  Puedo asegurarte que puedo ver dentro de ella."

Verónica - Oh, ahora Jesús sonríe.

Jesús - "Extended, hijos Míos, todos los sacramentales si los tenéis a mano; sin embargo, Yo los puedo bendecir con la bendición de la Trinidad sin que los remováis de sus envolturas.  En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo."

Verónica - Ahora Jesús flota hacia arriba.  El asciende muy alto.  El aire parece llevarlo; El simplemente flota hasta la punta.  Oh, ahora El cruza al lado izquierdo del asta de la bandera y Nuestra Señora está directamente detrás de El.  Y las cuatro monjas - Santa Terecina está adelante, y dos monjas ahora van al lado derecho de Santa Terecina, y la otra monja está detrás de ella.  Y ahora vienen al lado izquierdo, y Jesús ve hacia abajo.  Y El extiende sus manos hacia abajo, así:  En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.

Ahora Jesús desciende y mira hacia el árbol.  El extiende Su mano, así, y de Su mano, ¡oh!  Emanan rayos de las manos de Jesús, hay corrientes de luz muy brillante.  Oh, bajan ahora hacia el lado izquierdo aquí, de los terrenos.  Oh.  Oh, son muy, muy brillantes.

Ahora Jesús ve hacia arriba y hacia los árboles.  Y El señala hacia el cielo.  Debemos de ver hacia arriba.  Oh.  Está escrito en el firmamento - El señala hacia el árbol - dice: "FIELES Y VERDADEROS.  Fieles y Verdaderos.  Fieles y Verdaderos."  Está escrito tres veces, "Fieles y Verdaderos."

Ahora Jesús ve hacia abajo, y extiende Su mano.  El desciende por los árboles.  Y Nuestra Señora está ahí.  Nuestra Señora toma Su Rosario que tenía alrededor de Su cintura.  Es un bello Rosario.  Es todo blanco, las cuentas, y el Padrenuestro es la gran cuenta dorada.  Y Nuestra Señora ahora toma el crucifijo y lo sostiene delante de Ella.  Es - oh, es tan bello.  Está hecha de oro, me doy cuenta.  Y Ella ahora lo extiende:   En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.

Ahora Jesús mira hacia Nuestra Señora.  Y Nuestra... El asiente.  Y Nuestra Señora ahora desciende muy cerca a los árboles contiguo a... oh.

Nuestra Señora - "Hija Mía, hazles saber a todos los que han aceptado Nuestra invitación para venir a estos terrenos  consagrados y sagrados, que habrá abundancia de curación y conversión - curación del espíritu y curación del cuerpo; regreso a la Fe.  Todo esto será logrado por vuestras oraciones y vuestras pruebas de fe."

Verónica - Ahora Nuestra Señora pone el crucifijo delante de Ella y bendice:  En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.  Nuestra Señora sostiene las cuentas delante de Ella.  Las cuentas ahora - ahora las pone en Sus manos y saca algo de Su lado.  Oh, es un gran Escapulario.  Ahora Nuestra Señora...

 ESCAPULARIO - PROMESA DE SACRIFICIO PARA SALVACIÓN

Nuestra Señora - "Repite después de Mí, hija Mía: con esta armadura Nosotros venceremos a satanás - Mis cuentas de oración y la promesa de sacrificio para la salvación eterna."

Verónica - Y Nuestra Señora extiende el Escapulario.  Tiene un cuadro de Nuestra Señora sobre él.  Y ahora se agranda mucho, y resplandece.

Nuestra Señora - "Resplandece, hija Mía, ya que significa el poder de la Fe."

Verónica - Ahora Nuestra Señora retira Su mano.  Y no puedo ver qué se hizo el Escapulario - ha desaparecido.  Oh, Nuestra Señora ahora asciende;  Ella comienza a retroceder, arriba del estandarte.  Y Ella viene al lado derecho del asta de la bandera, y Jesús está detrás de Ella.  Y Nuestra Señora ahora se inclina.

Nuestra Señora - "Continuad, hijos Míos, con vuestras oraciones de expiación.  Ni un momento puede ser desperdiciado, ya que el tiempo se acorta - el tiempo para que recobréis las muchas almas que han entrado a la oscuridad.  En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.  Amén."   

 

 

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Revised: March 27, 2010