Nuestra
Señora de las Rosas, María Auxilio de Madres
14 Agosto 1975
- Víspera
de la Asunción de la Santísima Virgen María
Verónica - El cielo está muy iluminado esta noche.
Es extraño que las estrellas en el cielo formen un círculo Trinitario
aquí, no exactamente un círculo; es
como un triángulo, un triángulo Trinitario.
Ahora
hay una niebla muy densa que se forma en el centro del cielo.
Oh, no, no es una niebla; es una luz, una luz gris.
Ahora a medida que se acerca, se vuelve muy brillante.
¡Oh! Es la luz del Cielo.
Ahora
la luz se abre mucho más ampliamente, y puedo ahora ver más allá de la luz.
Nuestra Señora está de pie en lo que parece ser una media luna.
La mitad inferior está cubierta por una formación de nubes. Nuestra Señora está de pie allí... Hace bastante viento;
Su túnica es soplada por el viento alrededor del globo sobre el cual
Ella está parada. Y Nuestra Señora
está sonriendo. A través de la
luz todavía puedo sentir que la sonrisa que tiene Nuestra Señora no es una de
felicidad, sino es una sonrisa muy triste.
Nuestra Señora - "Hija Mía, el mal ha acelerado a través del
mundo. Me da muy poca razón para
sonreír, hija Mía.- Debe tomarse
acción ahora en contra de las fuerzas del mal.
Los niños del mundo realmente son las víctimas.
Madres y padres del mundo, ¿no protegeréis
las almas de vuestros hijos? Debéis
tomar acción contra aquellos que están propagando el mal.
“Padres
de familia, ¿habéis examinado lo que vuestros hijos han estado leyendo?
Sus ojos, que son el espejo del alma, están siendo contaminados, sus
almas están siendo destruidas por la pornografía que está siendo vendida para
tener utilidades y ganancias. ¿Por
qué no hay acción, hijos Míos, para salvaguardar a vuestros hijos?
Muchos padres de familia llorarán lágrimas amargas de angustia, pero
demasiado tarde, ¡demasiado tarde!
“He
ido por vuestro mundo exponiendo estos males, trayéndolos delante de vosotros
para que toméis acción. Tantos
han pasado, sintiendo apatía hacia Mis palabras.
“La
experiencia es un gran maestro, hijos Míos, pero os estáis poniendo rápidamente
sobre un camino que os llevará a una experiencia aterradora, porque estáis
trayéndole la destrucción a vuestro mundo.
“El
Padre Eterno ha sido misericordioso con vosotros. El ha observado con un Corazón entristecido como el hombre,
en su arrogancia y avaricia, se ha ido por el camino hacia la perdición.
Aquellos quienes tienen el poder de hacer el bien y fortificar a las
almas jóvenes en contra de los males de vuestros días y época - ellos, también,
han volteado sus espaldas, porque ellos han vendido sus almas para llegar a la
cima.
“¡Todo
lo que está podrido caerá! ¡Una
Iglesia en oscuridad lleva una banda de muerte a su derredor!
"Mis pastores - aquellos quienes se han dedicado a maestros de las
almas jóvenes - ¡estáis dispersando el rebaño! Regresad ahora de vuestra
mundanidad y de vuestra búsqueda por lo material.
¿Qué habéis ganado para vosotros mismos o para aquellos por quienes
habéis hecho un voto para proteger y guiar hacia el Reino eterno del Padre? ¡Los estáis guiando ahora, con vuestro ejemplo, hacia el
camino de la perdición!
“Pastores
del mundo, aquellos dados para guiar a las ovejas al Cielo, ¿os pararéis
delante de Mi Hijo y diréis que vuestras enseñanzas han sido puras a Su vista?
El os arrojará a los fuegos eternos de la condenación - ¡vosotros,
quienes os habéis olvidado de vuestros papeles como pastores!
“A
través del Corazón misericordioso del Padre Eterno en Mi Hijo, He venido a
vosotros como Mediadora entre Dios y el hombre, una portadora de noticias desde
el Cielo. Deseo que fuesen noticias
de gran alegría, pero habéis oscurecido vuestros espíritus y habéis puesto
sobre vuestro mundo una oscuridad total, una oscuridad de espíritu.
Por lo tanto, debo traeros noticias de advertencia, porque el Padre
Eterno tiene Su mano suspendida. ¡Él
liberará sobre vosotros un castigo como nunca abrase visto, ni puesto sobre la
humanidad en el pasado!
“Habéis
alejado de vuestras guías - vuestros ángeles, vuestros guardianes, vuestros
verdaderos pastores; vosotros,
quienes os habéis abandonado al mundo, dándole escape a todos los placeres de
la carne; vosotros, quienes os habéis
alejado de vuestro Dios y habéis puesto sobre el mundo toda manera de
abominaciones dentro de los corazones de la humanidad y aún dentro de las
iglesias del mundo - vosotros seréis juzgados delante del Padre Eterno, y
cosecharéis lo que habréis sembrado.
“Hija
Mía, no busco poner temor en tu corazón.
Como mensajera del Cielo, hija Mía, debes continuar con gran
perseverancia. Satanás tiene un
plan para detenerte, pero debes retirarte más a una vida contemplativa.
Es mejor si pasas más tiempo en meditación silente, hija Mía.
El silencio puede ser dorado. Entre
más te salgas al mundo, menos serás del espíritu.
“Hija
Mía, no sucumbas a ninguna tentación mundana.
Debes seguir Mis instrucciones muy cuidadosamente, hija Mía, o impondrás
sobre ti gran sufrimiento.
“Te
he pedido que te vistas con prendas largas para tu protección y como ejemplo
para los demás. Ningún hombre se
pondrá a juzgarte, hija Mía; por
lo tanto, no te preocuparás por la opinión de la humanidad.
"Hija Mía, ahora debes establecer una agrupación de fuerza para
detener la onda del mal en la pornografía que está encerrando a tu nación y
al mundo. Se necesita acción.
Hay muchos espíritus verdaderos que te ayudarán en esta lucha.
Es una verdadera batalla de los espíritus."
Verónica - Ahora Nuestra Señora va hacia el lado izquierdo - Su
lado derecho, nuestro lado izquierdo - y grandes lágrimas ruedan por Su rostro.
Puedo verlas porque se ven casi como diamantes a medida que ruedan por
Sus mejías. Y ahora Nuestra Señora coloca Sus manos sobre Su rostro.
Nuestra Señora - "Hija Mía, realmente llueven lágrimas del
Cielo. La castidad y la virtud - ¡qué
ha sido de ellas! Veo a Mis hijos y
estoy llena de gran vergüenza, porque el pecado se ha vuelto una manera de vida
entre vosotros.
“Si
aceptáis esta forma de vida, llena con pecado y abominaciones de la carne, no
podréis entrar, hijos Míos, en el Reino del Cielo.
Los pocos años cortos que han sido dados a la humanidad sobre la tierra,
hijos Míos - ¿vale la pena tirar una vida eterna por estos pocos años cortos
sobre vuestra tierra? Cuando paséis
el velo, hijos Míos, será para siempre - para siempre y siempre, y de allí en
adelante. No hay retorno una vez
halláis dejado vuestro cuerpo, ningún retorno hasta el Juicio General por el
Padre Eterno.
“Hay
grandes lágrimas derramadas por la pérdida de cada alma, y tantas almas caen
dentro del abismo - tan numerosas como los copos de nieve que caen de vuestros
cielos. No hay edad una vez pasada
la edad del razonamiento. Son jóvenes
y son viejos, hija Mía; toda clase
de almas caen dentro del abismo, el lugar sin retorno.
“El
número que va al Purgatorio, hija Mía, se ha vuelto pequeño, y aquellos que
entran en el Reino Eterno de la alegría, son todavía menos.
¿Qué será de Nuestros Hijos?"
Verónica - Nuestra Señora ahora llora muy profundamente, y Ella
coloca Sus manos sobre Sus ojos.
Nuestra Señora - "¿Quién podrá consolar Mi Corazón que sufre?
- ¡una Madre de los Dolores!
“Oración,
penitencia, expiación, hijos Míos - ¿seré sacada de aquí también?
¡He ido por vuestro mundo y He encontrado las puertas cerradas para Mí!
Las palabras del Cielo, el Mensaje de advertencia, irá por el mundo, aún
cuando las puertas se cierren, hijos Míos.
"Debéis continuar con gran vigilancia, mandar Mi Mensaje a través
del mundo - persona a persona, eslabón a eslabón, pluma a pluma, y palabra a
palabra. Toda la creación de la
humanidad conocerá el Mensaje del Cielo, y si la balanza - la balanza - no ha
sido aprobada por el Padre Eterno, el mundo será purificado con un bautismo de
fuego.
“Ha
sido escrito en el Buen Libro, hijos Míos, y debe llegar a suceder, ¡pero
derramo lágrimas amargas sabiendo que este tiempo que iba a ser en el futuro,
ha de ser ahora!- ¿Habéis
preparado, como padres de familia, a vuestra familia?
¿Habéis puesto a vuestro hogar en orden?
“Os
he pedido que pongáis en vuestro hogares el Libro de la Vida y del Amor,
vuestra Biblia. Padres de familia,
debéis leérsela a vuestros hijos, porque ellos no recibirán el conocimiento
de su Dios fuera de vuestra puerta. Los
maestros se han entregado al mundo. Cegados
de espíritu, endurecidos de corazón, y sordos de oído se han vuelto.
Demasiado tarde se despertarán en asombro, sabiendo que el tiempo se les
ha terminado para su repatriación.
“La
Bola de la Redención está allá afuera, hijos Míos. El Padre Eterno tiene el día y la hora."
Verónica - Ahora detrás de Nuestra Señora - hay una luz
tremenda que se forma detrás de Nuestra Señora, y puedo ver cierto número de
figuras que salen a través de la luz. ¡Oh!
¡Es San Miguel!
San
Miguel tiene puesta ahora - él tiene una túnica blanca puesta con una banda
dorada alrededor de su cintura. Y
ahora el cabello de San Miguel está muy evidente.
La luz es tan brillante. El
cabello de San Miguel - no es como el cabello humano. Puedo ver que es casi metálico;
es muy translúcido y dorado. Es
muy difícil verlo porque la luz que brilla de él, por encima de la cabeza de
Nuestra Señora, es tan brillante que es como astillas doradas de acero que
cortan a través de los ojos. Es
muy difícil de ver.
Ahora
San Miguel viene hacia adelante. Él
tiene la balanza dorada en su mano derecha, y tiene la lanza - es como un arco y
flecha; sí son un arco y una
flecha en su mano izquierda.
Y
detrás de él veo... hay dos ángeles muy, muy grandes. Oh, no son tan altos ni
tan brillantes como San Miguel, pero son muy, muy grandes - San Gabriel y San
Rafael, y el coro menor de ángeles - el coro de ángeles.
San Miguel dice que son los coros.
Hay
ahora muchos, muchos ángeles que se forman en todo el cielo.
Ellos vienen directamente a través de una formación de nubes.
Son muy bellos. Se ven
exactamente como guerreros. ¡Oh,
simplemente quitan el aliento!
Nuestra Señora - "Hija Mía, la humanidad ya no llama a sus ángeles
guardianes. Vosotros, padres de familia, ¿no les traeréis el conocimiento de
sus guardianes? Si deben salir a
vuestro mundo, que ha sido entregado a satanás, tienen que tener a sus
guardianes con ellos. Están sólo
para que los llamen, a menos que vosotros como padres de familia elevéis
vuestros corazones al Cielo y pidáis su protección para vuestros hijos.
“Hija
Mía, es difícil para ti, como humana, comprender las maneras del Cielo.
Pide y recibirás, pero muchos recibirán si otros piden por ellos.
Es una lección sencilla de amor, hija Mía.
“Muchas
oraciones son necesitadas para vuestro clero.
Si no fuese por vuestras oraciones, muchos estarían perdidos para el
Reino de Dios.
“Es
una falacia, hijos Míos, que aquellos quienes usan las vestimentas de los
maestros de la Luz, entrarán en el Reino Eterno. Ellos todavía son humanos, hijos Míos, y deben hacer su
camino también con su cruz. Ellos
necesitan de vuestras oraciones así como vuestros hijos y vuestros vecinos.
Es un acto de caridad del corazón rezar por vuestros pastores, hijos Míos.
“Estamos
disgustados, descorazonados, y desalentados, hijos Míos, al ver dentro de los
hogares de muchos. Los muchos se
han vuelto multitudes, hijos Míos. Encontramos mucha falta en los hogares.
La vida familiar se ha deteriorado y corroído.
Poco a poco, vemos que la estructura de la vida familiar se desintegra.
Hay muy poca disciplina y de ninguna manera santidad, en muchos de estos
hogares, hijos Míos. La enseñanza
es pobre, a decir lo menos.
“Debéis
restaurar en vuestros hogares los cuadros, los objetos de adoración - las
estatuas- para que vuestros hijos reciban un pequeño conocimiento de la
existencia del Padre Eterno y de aquellos habitantes del espíritu.
A menos que hagáis esto, hijos Míos, vuestros hijos estarán perdidos
para vosotros y para el Reino del Padre.
“Os
hablo con gran Corazón y esperanza, pero no puedo escapar el enviaros el
Mensaje del Cielo, que es una advertencia - una advertencia a menos que enmendéis
ahora vuestras maneras que ofenden al Padre Eterno, vuestro mundo será
purificada por prueba.
"Habrá
una terrible guerra - una catástrofe, hijos Míos. Será una cosa más allá de cualquier cosa que la humanidad
jamás haya visto. Las naciones
desaparecerán de la faz de la tierra. Los
cuerpos se quemarán y volarán y no encontrarán lugar de reposo. Habrá revoluciones en los países del mundo - hermano contra
hermano, hermana contra hermana. Los
cuerpos estarán tirados en los mercados, sin enterrar y descubiertos, ¡tantos
serán los muertos! Hijos Míos, ¿es
esto lo que queréis?
“El
Padre Eterno es el Creador del bien y la santidad. El ve sobre vuestro mundo y encuentra asesinatos y toda
manera de abominación y pecado. El
pecado en vuestro mundo es ahora mucho peor, hijos Míos, como jamás ha sido
visto por la humanidad, porque vosotros tenéis una manera de vida, un pecado
que ha estado llamando un - "
Verónica - ¡Oh! Y
Nuestra Señora señala hacia el cielo. ¡Oh!
¡Oh! Veo esta terrible bola
giratoria de fuego. Está tan
caliente, siento que estoy siendo quemada - el calor.
¡Oh! Oh, ahora regresa al
cielo. Se siente un poco más
fresco. Ahora Nuestra Señora se
adelanta.
Nuestra Señora - "Hija Mía, no deseo poner temor en tu corazón,
pero no puedo dejar de darte este terrible conocimiento de la prueba que será
enviada sobre la humanidad. ¡Grítalo
desde los tejados, hija Mía! Se te ha dado una gran Misión para alertar a la
humanidad y prepararla.
“He
pedido que recéis por la conversión de Rusia.
No habéis rezado por ella como nación, porque las personas son guiadas
en la oscuridad, y estos errores están siendo enviados a través de vuestro
mundo. Rezad una constante vigilia
de oración. Los líderes de
vuestra nación lentamente están sucumbiendo al mal.
El ejemplo entre vuestros líderes es malo.
“Cuando
un hombre acepte un mal y se ponga como ejemplo para la multitud, ¡será
atestado por la espada!
“A
menos que la humanidad siga el plan del Cielo, hija Mía, tu Vicario será
removido de la Ciudad Eterna y sangre fluirá en las calles.
“No
podéis comprender las maneras del Cielo, ni el conocimiento del Padre Eterno;
por lo tanto, debéis seguir las instrucciones del Cielo cuidadosamente.
Oración, penitencia y expiación - se os ha dado tiempo para cambiar.
El tiempo se acorta.
“Aquellos
que están bien de espíritu no tendrán nada que temer, hija Mía, porque ellos
pasarán por este terrible crisol de sufrimiento con más esperanza y valor,
sabiendo que la victoria eventual estará más allá del velo con el Padre
Eterno. Habrá muchos mártires en
la conflagración que se avecina. Realmente
será la cruz.
“Debes,
como hija de Dios, levantar tu cruz y llevarla, aunque esté muy pesada.
El sufrimiento será una manera de vida muy pronto para muchos.
Todo está en el plan del Padre Eterno, separar las ovejas de las cabras.
Estáis siendo probados hijos Míos.
El hombre, su libre voluntad, aceptará o rechazará la oferta del Padre
Eterno del Cielo."
Verónica - Ahora Nuestra Señora extiende el crucifijo dorado
del Rosario, y hace la señal de la
cruz.
Nuestra Señora - "Os bendigo, hijos Míos, en el nombre del
Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
“Verónica,
hija Mía, debes llevar adelante el conocimiento de Mí ida hacia el Reino.
Yo fui asunta. Es vuestra Fiesta de la Asunción. Extiendo a todos Mis hijos el conocimiento que ellos se unirán
a Mí y a Mi Hijo en el Reino Eterno cuando pasen el velo.
Oración, penitencia y expiación - es el camino de la cruz."
Verónica - En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu
Santo. Amen.
Nuestra Señora - "Ahora te puedes sentar, hija Mía."
(Pausa).
Verónica - Hay una formación gris de luces en el cielo arriba
del estandarte de San Miguel. Ahora
centrado alrededor de la luz se forma un enorme ostensorio en el cielo.
Es muy - no es un ostensorio dorado;
parece estar hecho de formación de nubes.
Es de color gris. Ahora del
centro, en la parte superior del ostensorio - oh, puedo ver a Jesús de pie allí. Él viene hacia adelante.
Simplemente es llevado hacia adelante.
El no camina como nosotros; Él
parece flotar en el aire.
Y
ahora Jesús tiene Su capa - es un manto color rojo-borgoña - sobre Su brazo,
Su brazo izquierdo, y ahora está
de pie con Su mano extendida, así. Oh,
Él hace la señal de la cruz: En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu
Santo.
Ahora
todos los que puedan arrodillarse, por favor háganlo.
Jesús - "Hijos Míos, no tengo que ampliar las palabras
de Mi Madre. Estoy seguro que el
Mensaje del Cielo se está haciendo muy conocido para todos.
“Es
en el Corazón misericordioso del Padre que se os dé el tiempo para hacer
enmiendas.
“Las
fuerzas del mal están ahora reunidas para empezar una gran guerra.
No os volváis desprotegidos. No
estáis recibiendo un conocimiento justo de lo que está ocurriendo por los
poderes gobernantes de vuestro mundo.
“Os
prevengo, hijos Míos, que mantengáis una constante vigilia de oración - oración,
expiación y sacrificio. Con el
conocimiento de lo que os espera, estaréis seguros con el tiempo que esto fue
poco haberos pedido.
“El
balance para vuestro castigo está con la humanidad. En el conocimiento misericordioso y el poder del Padre Eterno,
habéis recibido una gran gracia para ser llamados a una distancia audible de la
voz de Mi Madre. Sabed que con esta
gracia, mucho es esperado de vosotros. Todos
seréis apóstoles de la Luz, yendo hacia adelante y reuniendo a las ovejas
descarriadas. Ningún hombre será
perdido para Nosotros, excepto por su libre albedrío.
“Os
bendigo a todos, hijos Míos, con una abundancia de gracias: gracias para
curaciones, y gracias para conversiones, todo con sólo pedir."
Verónica - Ahora Jesús extiende Su mano, así.
Sus tres dedos están juntos, y Él hace la señal de la cruz: En el
nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
Jesús
va hacia... El flota. Hace mucho
viento, porque Su manto es llevado detrás de Él a medida que El cruza ahora.
Y Jesús ve hacia abajo y extiende Su mano: En el nombre del Padre, y del
Hijo, y del Espíritu Santo.
Ahora
Jesús ve hacia abajo. Él va hacia
el árbol. Está justamente por
encima del árbol, y El ve hacia abajo.
Jesús - "Hija Mía, escucho tus ruegos.
Serás curada - "
Verónica - Él extiende Su mano ahora, así: En el nombre del
Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Jesús
dice -
Jesús - "Sí, hija Mía, siéntete libre de repetir Mis
palabras."
Verónica - Jesús dice que uno que está por el árbol alto será
curado de una aflicción que se ha sabido incurable para la humanidad.
Ahora
Jesús asiente. Él va ahora hacia
adelante, viene justamente por encima del estandarte, y ahora ve hacia abajo y
extiende Su mano, así: En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu
Santo.
Jesús - "No os quitaré vuestro tiempo de oración para
repetir, hijos Míos. Habéis
recibido una buena dirección de Mi Madre.
Ahora debéis separaros de vuestro mundo que ha sido entregado a satanás.
Su tiempo se acorta, pero él dará una gran batalla contra los hijos de
Dios.
“Continuad
con vuestras oraciones de expiación y vuestros actos de sacrificio.
Son dolorosamente necesitados en este momento."
Verónica - En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu
Santo. Amen.
(Verónica
reza el Credo).
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Revised: March 27, 2010