Nuestra
Señora de las Rosas, María Auxilio de Madres
31
Diciembre 1975 - Víspera de la Solemnidad de Nuestra Señora, Víspera de Año
Nuevo
Verónica
-
El cielo está muy nublado, pero hay luces que emanan de la dirección por la
estatua de Nuestra Señora, luces blancas brillantes. Y del lado derecho, justamente por el árbol, hay hostias que
se forman en el cielo, bellas hostias romanas redondas.
Ahora descendiendo de muy
alto en el cielo, Jesús viene hacia adelante.
Él tiene puesta una oscura... una túnica crema con un cordel como soga
alrededor de Su cintura, y sobre Sus hombros hay una capa color borgoña.
No parece estar lloviendo porque la luz es tan brillante. Está muy, muy
cálido.
Jesús
-
"Hija Mía, pronto se Nos unirá Mi Madre.
“Comprende que hay muchas
misiones que son dadas a Nuestros hijos sin su completo conocimiento.
“Esta es una noche de
gran penitencia para muchos. Esta
es una noche de gran angustia para muchos, hija Mía.
“Mi Madre ha ido a través
de vuestro mundo suplicándoos que hagáis penitencia y expiación para que tengáis
una postergación del gran Castigo que iba a ser en el futuro.
Os digo, hijos Míos, 'iba a ser'. Debido a que el hombre cae más
profundamente en pecado y no hace penitencia por las abominaciones que son
cometidas en vuestra tierra y en Mis Casas a través de vuestro mundo, esto no
le deja otro recurso al Padre Eterno sino poner sobre vuestro mundo una gran
prueba.
“Las mentes de aquellos
que han caído fuera de la gracia serán capturadas y usadas por satanás, el
adversario, y sus agentes. Toda
clase de acciones asquerosas, de crueldad, y de muerte vendrán de las mentes
malignas.
“Tu ciudad, hija Mía,
Nueva York, pasará por un crisol de sufrimiento, así como muchas otras
ciudades de tu nación y a través del mundo.
"La Ciudad Eterna de Roma debe ahora tomar acción por aquellos que
la gobiernan, los cardenales y los obispos, para restaurar esta ciudad a la Luz.
Aquellos que busquen construir una iglesia del hombre deben ser removidos por el
poder de la excomunión dado a aquellos que gobiernan como representantes en Mis
Casas, Iglesias, sobre vuestra tierra.
“Como
en el tiempo de Noé, así como fue en los días de Sodoma y Gomorra, así será
sobre vuestra tierra.
“Se
le permitirá al hombre caer rápidamente al abismo. ¿Por qué? Porque él ha endurecido su corazón y ha cerrado
sus oídos a la verdad. El se ha
entregado a sí mismo a toda clase de placeres de la carne.
El pecado se ha vuelto una manera de vida en vuestra nación y en las
naciones a través de vuestra tierra.
“Los
hijos de Dios, las candelas sobre la tierra, hija Mía, sufrirán mucha
persecución de los agentes de la oscuridad.
“El
hombre corre erradamente, hija Mía. El
dispersa a las ovejas. El busca paz
en donde no hay paz. Él va más
profundamente en la oscuridad.
“¡No
reuniréis vuestros rebaños, Mis pastores, comprometiendo vuestra Fe! No reuniréis
los rebaños para el Padre Eterno en el Cielo, entregándoos al mundo, adoptando
al humanismo y al modernismo como vuestros guías.
“Es
una lección sencilla de fe que debéis darle a los niños y a todos bajo
vuestro cuidado. Como Mis pastores, ¿os pondréis de pie delante de Mí y Me
diréis que vuestras enseñanzas han sido puras delante de Mi vista?
Amén os digo, os arrojaré de Mí y os enviaré al abismo.
Así como sembráis, así cosecharéis.
"Removeréis a las mujeres de Mi Iglesia como líderes y gobernantes.
¿De qué? ¿Qué clase de
acciones asquerosas fomentáis?
“En
el principio os di, a través de vuestros profetas, el establecimiento de Mi
Iglesia sobre la tierra. Las leyes
eran sencillas pero ahora han sido cambiadas y profanadas para agradar la
naturaleza carnal de la humanidad. ¡Debéis
restaurar la santidad en Mi Casa! Debéis
arrodillaros en humildad y en penitencia."
Verónica - Ahora Jesús señala hacia arriba,
alto por encima de Su cabeza, a Su lado derecho.
El cielo se pone muy claro, y Nuestra Señora viene hacia adelante.
Hay una blanca luz brillante toda alrededor de Nuestra Señora, y Ella
sostiene Sus manos delante de Ella muy suplicantemente. Ella se ve tan frágil y
tan bella, no lo puedo expresar en palabras humanas.
Ahora
Nuestra Señora va hacia allá y está de pie a la par de Jesús.
Nuestra Señora Le llega un poco por debajo de Su hombro.
Nuestra Señora tiene puesta una túnica blanca pura y sandalias,
sandalias doradas. Y en cada
sandalia hay una pequeña rosa, una rosita.
Alrededor
de Nuestra Señora... Ella tiene un manto largo sobre Su cabeza, fijado en su
lugar por un círculo de rosas. Son
rosas bellas, el color es una
mezcla de colores del arco iris. Nunca
he visto rosas como éstas sobre la tierra.
Son tan bellas, ellas capturan todos los colores del arco iris.
Nuestra
Señora ahora se toca Sus labios con Su mano, lo que significa escuchar
cuidadosamente.
Nuestra Señora - "Hijos Míos, ¿qué más puedo deciros en este
momento para continuar con el Mensaje del Cielo para Mis hijos?
Mis advertencias han caído sobre oídos sordos.
“Los
pequeños niños que son puros de corazón y sencillos en naturaleza, ellos
escuchan; pero aquellos que han aceptado gobernar la Casa de Mi Hijo, ellos
cierran sus oídos, ya sea por temor de una reprimenda de sus superiores o en
absoluto ceguera de corazón y de espíritu hijos Míos.
Rezad una constante vigilia de oración por vuestros pastores.
"Rezad por vuestros cardenales en la Ciudad Eterna, y sobre todo,
hijos Míos, debéis rezar por vuestro Santo Padre, el Papa Pablo.
Sin suficientes oraciones, hijos Míos, vuestro Santo Padre será
removido de entre vosotros. Y uno
será colocado sobre la silla de Pedro, uno que conoce secretos oscuros. El no será de vuestro Dios, sino un agente del infierno.
“Hijos Míos, debéis ser valerosos en los días venideros y sabed que el Padre Eterno tendrá el conteo final. Él permite mucho para llevaros en este crisol de sufrimiento.
"Hija
Mía, ¿cómo puedo explicarte los misterios del Cielo?
Debes aceptar la voluntad del Padre Eterno sin dudar.
“¿Preguntas,
hija Mía, por qué tanto es permitido, tanto mal? Es porque, hija Mía, hay muchas ovejas descarriadas.
Si fuésemos a permitir en este momento el castigo completo, demasiados
de Nuestros hijos se Nos perderían. El
Padre Eterno está resistiéndose y permitiendo el tiempo para reunir a estas
ovejas.
“Cuando
el Castigo venga sobre la humanidad, hijos Míos, habrá un castigo como nunca
antes visto en la historia de vuestra tierra, y como jamás será visto de nuevo.
Muchos morirán en la gran llama de la Bola de la Redención.
“Hija
Mía, Verónica, no vaciles en dar el mensaje completo al mundo. Los Míos Me
conocerán, hija Mía. Sabe que
aquellos que hacen el mal no quieren que sus pecados sean expuestos.
No es que juzguéis, sino la advertencia debe ser dada a la humanidad."
Verónica - Nuestra Señora toma de Su cintura Su Rosario, Su
bello Rosario blanco con los Padrenuestros dorados, y toma el crucifijo y lo
extiende delante de Ella y hace la señal de la cruz: En el nombre del Padre, y
del Hijo, y del Espíritu Santo.
Ahora Nuestra Señora gira hacia Su lado derecho, y ve hacia abajo y hace la señal de la cruz con Su crucifijo: En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
Jesús
está de pie allí, y Él extiende ahora Su mano, así, tres dedos extendidos,
así, Su pulgar y Sus dos primeros dedos, y hace la señal de la cruz: En el
nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
Jesús
flota hacia allí. El no camina,
Él es llevado, llevado sobre le viento, hacia nuestro lado izquierdo.
Y Nuestra Señora Lo sigue.
Ahora
descendiendo del lado derecho está San Miguel.
Oh, él está vestido en una túnica blanca muy vaporosa, y su cabello
esta noche resplandece. Es como de
oro metálico. ¡Oh, y él es tan
enorme, San Miguel! No hay manera
humana que pueda describir el tamaño de San Miguel.
¡Él es tremendo! Ahora él
también va... él está justamente detrás de Nuestra Señora, cubriendo todo
el lado derecho del cielo.
Y
Jesús ahora ve hacia abajo, y hace
la señal de la cruz: En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
Ahora
Nuestra Señora y Jesús flotan hacia arriba, arriba por encima de la estatua y
están de pie allí. Y San Miguel
ahora señala al cielo, y él... y hay una tremenda cruz oscura que se forma en
el cielo.
Ahora
San Miguel también toca sus... no puedo ver sus labios, pero sé que tiene su
mano en la dirección de sus labios.
San Miguel - "¡Ay, ay, ay de los habitantes de la tierra!
¡Locura de pecado! El
hombre verá y recibirá los frutos de su desarrollo por satanás."
Verónica - ¡Oh! Veo
una ciudad. La ciudad está sobre
el agua. Y veo una tremenda explosión.
¡Oh! Oh, los edificios caen
y se derrumban como si fueran hechos de yeso.
¡Oh! ¡Oh!- Nuestra Señora
ahora viene hacia acá.
Nuestra Señora - "Hija Mía, en el curso de tu vigilia recibirás
dos fotografías. Comprenderás,
porque ellas serán muy claras. Este
conocimiento no será dado en este momento.
“Ya,
hija Mía, los castigos han comenzado. El
hombre procederá en un curso de locura, perdiendo todo respeto por la vida
humana y la caridad, todo porque se ha entregado a satanás y los placeres de la
carne.
"Satanás buscará tu nación en donde quiera que haya oscuridad de
espíritu, y en aquellos lugares, hija Mía, en los cuales toda clase de maldad
surgirá, maldad como nunca antes haya sido vista en tu tierra. Los seres
humanos infestados por el diablo, trabajando toda clase de mal en contra de sus
hermanos y hermanas.
“Oh,
hija Mía, ¿te podría prometer todo amor y toda luz? ¿Te engañaré abriendo un cuadro de paz y de felicidad ante
ti? No puedo mentir y traerte lo
que complace tu naturaleza humana. Esto
ha sido arrojado por la humanidad, quien ha colocado a la ciencia y a la
tecnología por encima de su Dios.
“Hija
Mía, ahora mantendrás una constante vigilia de oración.
“Oración,
penitencia, y expiación estarán ahora en vuestra ley, hijos Míos.
Haced mucha penitencia y haced mucha expiación por los pecados de la
humanidad. De esta manera Nosotros
reuniremos a aquellos que han de salvarse.
Verónica - Ahora Nuestra Señora extiende Su mano, y hay rayos
que emanan de los dedos derechos de Nuestra Señora, los dedos de Su mano
derecha, y se extienden como bellas luces cálidas hasta aquí abajo sobre los
terrenos de Nuestra Señora, aquí por Su estatua. Y ahora las luces pasan por encima de nuestras cabezas.
Son bellas corrientes de luz blanca.
No sé el completo conocimiento del poder de esta luz, pero sí da una
gran fortaleza, dice Nuestra Señora, en los días venideros.
Es gracia.
En
el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
Nuestra Señora - "Continuad ahora, hijos Míos, con vuestras
oraciones de expiación."
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Revised: March 27, 2010