Nuestra
Señora de las Rosas, María Auxilio de Madres
25
de Julio de 1979 - Víspera de la Fiesta de Santa Ana y San Joaquín
¡OBISPOS!
¡CARDENALES! ¡SI NO AMÁIS A MI HIJO, ¡¿ES QUE NO TENÉIS NI UN VESTIGIO DE
TEMOR?!
Verónica
-... formándose a todo alrededor de los árboles.
Ahora del centro lentamente viene una bella corriente de luz11no una
corriente, sino que debería decir corrientes de luz que vienen del centro del
cielo directamente arriba de la estatua de Nuestra Señora. Ahora se está abriendo el cielo.
No hay manera alguna en que yo pueda explicarlo humanamente hablando, o
con palabras (adecuadas), para expresar la manera en que el cielo simplemente se
enrolla hacia atrás, como si fuera una cortina o un velo, y simplemente se
evapora.
Y
ahora directamente arriba de la estatua de Nuestra Señora, arriba en el cielo,
yo puedo ver que Nuestra Señora viene por el cielo.
Ella viene muy rápidamente porque ahora Le puedo ver Sus pies.
Nuestra Señora tiene puestas zapatillas muy delicadas.
No son zapatillas; debería más bien llamarlas sandalias porque son de
oro con dos piezas insertadas en forma de "V" sobre Sus tobillos, y
supongo que las tiras doradas que yo puedo ver alrededor de Sus tobillos las
sostienen.
Nuestra
Señora está vestida toda de blanco, y tiene una banda azul muy ancha en Su
cintura. En todo el contorno del
manto de Nuestra Señora hay un adorno, un borde dorado, que yo diría es de
aproximadamente una pulgada y medio de ancho.
Va en todo el contorno del manto de Nuestra Señora, alrededor de Su
cabeza y hacia abajo, hasta llegar a Sus pies.
Nuestra
Señora tiene Sus manos unidas en oración, así, y tiene entrelazado, entre Sus
dedos, Su bello Rosario. Las cuentas son muy grandes y tiene los Padrenuestros dorados
y las cuentas blancas de las Avemarías entrelazadas entre Sus dedos.
Están sobre Sus manos, unidas, así, y señalan hacia arriba en oración.
Ahora
Nuestra Señora está a unos..., diría yo, unos tres pies arriba de Su estatua.
Ella se ha acercado mucho esta noche.
Nuestra Señora ahora toma Su Rosario, el Rosario con el bello crucifijo
dorado, y Ella hace la señal de la cruz: En
el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
Nuestra
Señora sonríe muy suavemente. Hay
una paz profunda y a la vez tristeza en Nuestra Señora esta noche.
Ella mira a Su derredor ahora, y Ella coloca el crucifijo en Su mano
izquierda y toca Sus labios con el dedo índice de Su mano derecha, lo cual
significa escuchar.
Nuestra
Señora
- "Hija Mía e hijos Míos, no lo creo necesario que Yo entre en un largo
discurso sobre el estado de vuestro mundo, el estado espiritual.
Es por demás decir, que el hombre ahora por su propia voluntad ha
cubierto el mundo entero en una oscuridad espiritual profunda.
En el plan del Padre Eterno hay candelas de luz, focos de conocimiento en
los corazones de aquellos escogidos por el Padre Eterno para mantener la verdad
de la Fe. Este conocimiento debe
incluir la Tradición.
"Os
digo como Madre vuestra que el Padre Eterno está muy disgustado por la manera
en que os conducís, Oh clero, y también todos los laicos, la manera en que os
conducís propiamente durante el Santo Sacrificio de Mi Hijo.
Menos y menos respeto y honor está siendo dado a la Eucaristía.
"¿Cuánto
tiempo más podrán Mis lágrimas derramarse sobre vosotros? Mi Corazón (es)
destrozado una y otra vez al ver que Mis hijos progresan cada vez más hacia la
oscuridad espiritual, y que se entregan a toda clase de pecado.
Los pecados de la carne envían diariamente a muchas almas a la condenación
al infierno.
"No
escuchéis a los falsos profetas que van a través de vuestro mundo ahora y que
dicen e imprimen y publican errores, que declaran en ellos que no hay un lugar
de castigo. Os aseguro, hijos
Míos, que antes que un alma pueda entrar al Cielo - el Reino Eterno de luz esa
alma tiene que estar tan pura como un copo de nieve antes de entrar a vuestra
atmósfera a contaminarse, como el ser human que vive sobre la tierra se
contamina de alma y cuerpo.
"Hijos
Míos, os he advertido en el pasado, y os aconsejo ahora como Madre vuestra, que
tengáis cuidado de los que se os acercan como ángeles de luz.
Ellos están engañados o son agentes declarados del infierno. Proteged a vuestros hogares.
No permitáis que este mal entre a vuestros hogares para contaminar las
almas de vuestros hijos. Los padres
de familia tienen que advertir a sus hijos cuidarse de otros jóvenes quienes se
les acercan en las calles.
"Hijos Míos, el Libro de la Vida, vuestra Biblia, ha sido reescrito - escrito para satisfacer los modos del modernismo y del humanismo. Satanás también puede citar las Escrituras. Y debéis comprender que satanás se cubrirá a sí mismo con engaño apareciendo en seres humanos como ángeles de luz. En una mano ellos sostienen la Biblia, pero en la otra un puñal semejante al satanismo.
"Hijos
Míos, debéis todos rezar una constante vigilia de oración.
Yo sé que el Mensaje del Cielo ha llegado a todos los rincones de la
tierra, y pido que todos y cada uno que escucháis
Mi voz, o leáis el Mensaje del Cielo, que os convirtáis en discípulos
de vuestro Dios y que Lo divulguéis a pie o por escrito.
"No
os desilusionéis debido a las acciones de aquellos quienes desacreditan su
vocación. ¡Hijos Míos, sí!
Os he pedido recéis por vuestros obispos, vuestros cardenales, vuestros
sacerdotes. Ellos son seres humanos,
y ellos, también, pueden caer. Ellos
no tienen un pasaporte especial al Cielo. Sin
vuestras oraciones, ellos, también, caerán."
Verónica
- Ahora Nuestra Señora señala a Su lado derecho, el lado izquierdo del cielo.
Y yo puedo ver una bola grande que se forma.
Parece un globo del mundo; pero extrañamente tiene como una mecha en la
parte de arriba.
Y
ahora saliendo del cielo, yo puedo ver una figura de apariencia cómica.
Lo encuentro cómico; pero a la vez asusta.
Su rostro es extremadamente gordo, y sus dientes son enormes. Pero parece ser un oriental de algún país.
Él está sonriendo de una manera muy peculiar.
Noto que él tiene - es bajo de estatura y su cuerpo es grueso.
Pero él está sonriendo de una manera muy maligna.
Está parado mirando, con sus manos detrás de él, y parece como si
estuviera esperando algo. ¡Oh!
"Ahora
saca algo de su espalda lo que parecer ser una candela larga y delgada.
Y ahora él alcanza hacia arriba... La candela tiene una luz. Parece como si él estuviera a punto de tocar la mecha de la
bomba. Parece una bomba,
pero se asemeja al mundo con una mecha que sale de ella.
¡Ay!
Él
es muy - no sé quién es él; no lo reconozco.
Pero él es un oriental y tiene dientes muy grandes; y la sonrisa hasta,
la manera en que está sonriendo, hace que sus dientes sean -
prominentes. Pero él tiene
- debo decir que él da una sensación de miedo porque su sonrisa es muy mala. Ahora no lo puedo ver. Es
como si un velo ha sido colocado sobre la escena.
Ahora
Nuestra Señora va más cerca de nuestro lado izquierdo, Su lado derecho.
Nuestra
Señora
- "Hija Mía e hijos Míos, os he dado ahora una visión de lo que está
por ocurrir pronto. Comprenderéis
en el futuro cercano, hijos Míos. Y,
tu, hija Mía, no revelarás la escritura debajo de él.
Mira ahora, recuerda, pero no repitas. (Pausa)
Recuerda, hija Mía: Mira, recuerda, pero no repitas.
"Hija
mía e hijos Míos, debéis rezar constantemente.
Y os pido ahora una concentración especial, urgente, de la Orden de los
Benedictinos para enviar el mensaje de San Benito a todos, incluyendo su medalla
fundida por muchos miles, por razones que el hombre no puede comprender.
Esta medalla será llevada por todos, porque sin ella gran calamidad caerá
sobre el individuo.
"Habrá accidentes que no serán accidentes, grandes catástrofes de la naturaleza... Pero os aseguro, hijos Míos, como os lo he aconsejado en el pasado; llevaréis vuestros sacramentales, y mantendréis los altares y las imágenes en vuestros hogares.
"Os pido como Madre vuestra, también, no cedáis ni os deis por vencidos en esta lucha para retener una semblanza de la Iglesia de Mi Hijo sobre la tierra. Hablaréis y continuaréis abordando al clero de vuestra parroquia. Las imágenes, las estatuas, deben permanecer.
"Todo
honor deberá ser dado a Mi Hijo en la Eucaristía.
El hombre deberá arrodillarse (para adorarle).
La Casa de Mi Hijo es la Casa de Dios y una casa de oración, y no deberá
ser convertida en un salón de reuniones.
"No
ganaréis almas ni tampoco entraréis al Cielo al emplear humanismo y modernismo
y cambio en vuestro acercamiento. El
Cielo os ha dado un plan completo para la redención de las almas.
No cambiaréis este plan para satisfacer la naturaleza básica carnal del
hombre.
"Los
enemigos de Dios han entrado aún dentro de la Iglesia de Mi Hijo.
¡¿No iréis como discípulos en estos últimos días y lucharéis por
Mi Hijo para retener Su Iglesia?!
"¡Obispos!
¡Cardenales! Si no amáis a
Mi Hijo, ¡¿es que no tenéis ni un vestigio de temor?! ¿Pensáis estar delante de Él y decir que vuestras enseñanzas
han sido puras ante Sus ojos? El os
echará a un lado como las víboras en que os habéis convertido en la destrucción
de las almas. El os echará al
abismo y a la condenación eterna. No
engañáis a nadie. El Padre
Eterno ha sido muy paciente."
Verónica
- Ahora Nuestra Señora toma Su Rosario y hace la señal de la cruz, así, con
Su crucifijo dorado: En el nombre
del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
Nuestra
Señora
– “Os bendigo a todos, hijos Míos, por el Padre Eterno, Mi Hijo y el Espíritu
de Luz. Continuad con vuestras
oraciones, hijos Míos. Son
dolorosamente necesitadas. Si os
pudiera llevar conmigo en Mis viajes a través del mundo, haríais vuestros
quehaceres diarios sobre vuestras rodillas.
"Almas
víctimas son necesarias. Deberán
haber almas víctimas, porque el balance está desigual, y cuando este balance
caiga pesadamente a la izquierda, habrá mucho crujir de dientes y pesar,
enviado sobre la tierra. Las
grandes calamidades están por comenzar, hijos Míos.
"Rezad
constantemente. Os repito, llevad vuestros sacramentales.
Mantened una firme base de Fe en los corazones de vuestros hijos o
vuestros corazones serán destrozados.
"Hija Mía, continuarás haciendo contactos en tu área local de la manera en que te he dirigido. (Pausa) Sí, hija Mía, Nosotros esperamos mucho de ti. Se te dará la fuerza a través de la luz."
Verónica
-... Ahora directamente arriba de la estatua de Nuestra Señora, hay una cascada
tremenda de color - rosado, parecida al color
rosado alrededor de los árboles ahora. Pero
viene en rayos directos, hacia abajo, a la tierra, directamente del centro del
cielo. El cielo se abre, también,
de una manera misteriosa. Yo no lo
puedo explicar con lenguaje humano, la manera en que el cielo se enrolla hacia
afuera, como si hubiera algo justo más allá de lo que podemos ver.
Y
Jesús viene hacia adelante. Sus pies están desnudos, no trae sandalias esta noche.
Yo puedo ver las Llagas en Sus empeines ahora al descender Él.
Él está muy cerca, también. El
se acerca a la estatua de Nuestra Señora, tan cerca como estaba Nuestra Señora
esta noche.
Jesús
trae puesta una túnica de color de lino crudo – no exactamente blanco, sino
de un color crema, muy, muy amplio y amarrado en la cintura con una cuerda que
parece que pudiera ser de, como, piel de animal, de una pulgada de ancho.
Parece como piel, pero de un color muy claro.
Él trae una capa. Jesús
tiene puesta esta capa de color borgoña. Su
cabello cae suelto, y hace un poco de viento.
Jesús
gira ahora a la derecha, a Su derecha y a la izquierda, y Él sonríe.
Su rostro brilla mucho. Es
muy difícil ver directamente al rostro de Jesús debido a la tremenda luz que
emana de Él a todo Su derredor. Es
una luz tan brillante que estoy segura que sin la gracia del Padre Eterno yo
estaría cegada por la brillantez de la luz.
Ahora
Jesús coloca Su mano hacia afuera, así, con Sus dos dedos hacia adelante y el
pulgar extendido, así, y hace la señal de la cruz:
En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Jesús lleva
Su dedo índice a Sus labios, lo que significa escuchar y repetir.
Jesús
- "Hija Mía e hijos Míos desesperados, Mi Corazón sangra por vosotros,
ya que Yo conozco bien las terribles pruebas que han llegado sobre muchos de
vosotros. Vuestros ruegos de
comprensión y ayuda no han quedado sin contestar.
"Hijos Míos, Nuestra petición primordial es que no os concentréis en lo material sino en el bienestar espiritual de vuestras almas eternas. Nosotros sí podemos enviaros ganancias materiales, salud física, y otros pedidos para la felicidad. Pero, hijos Míos, debéis comprender que primordialmente, y por encima de todo, debéis pedir salud del espíritu.
"Mientras la oscuridad se profundiza sobre vuestra tierra, vuestro mundo les parecerá a muchos como si la locura hubiera llegado a ella: los asesinatos aumentarán, accidentes llamados `fenómenos de la naturaleza', accidentes que no son accidentes. Los niños continuarán levantándose en contra de sus padres, incitados en sus colegios por sus maestros, los medios noticiosos, y todos los medios que han sido bien preparados para seducir a las almas de vuestros hijos. Y el amo tras estos medios es Lucifer y sus agentes del infierno que andan ahora en forma humana.
"Hijos
Míos, mientras rechacéis la existencia de lo sobrenatural, no podéis ser
salvados. Si no reconocéis la
existencia de un mundo más allá de lo que vuestros ojos pueden ver, no seréis
salvados, porque no podréis luchar contra ellos.
Hay demonios ahora sueltos sobre la tierra.
Todo el infierno ahora está suelto sobre la tierra con Lucifer a la
cabeza, conocido como el ejército de satanás, el príncipe de las tinieblas.
Lucifer fue un asesino desde el principio, y él será un asesino hasta
el final.
"Muchos
de vosotros, hasta el clero en Mi Iglesia, Mi Casa sobre la tierra, están
vendiendo sus almas para llegar a la cima, ¿y para qué?
No hay una sola alma sobre la tierra que no deberá morir, que no morirá.
Cada criatura que vive sobre la tierra morirá temprano o tarde.
El cuerpo morirá, pero vuestro espíritu no lo hará.
Vuestro espíritu vivirá con plena conciencia, al pasar al juicio.
"He
pedido muchas veces que la palabra muerte sea empleada únicamente para el
cuerpo humano. Para el hombre,
creado en la imagen de su Dios, no hay muerte si él acepta los mandamientos de
su Creador y vive su vida sobre la tierra como se le ha pedido y como ha sido
dirigido por su Creador. El hombre con su voluntad propia puede también rechazar los
llamados del Cielo y caer víctima, voluntariamente o no, a satanás.
Aquellos quienes caen en la telaraña de Lucifer, sin saberlo, podrán
ser regresados por medio de la caridad y las oraciones de otros.
"Hija
Mía e hijos Míos, ¿no podéis comprender lo que le ha ocurrido al hombre al
negar la existencia del purgatorio? Hay
almas ahora sedientas por vuestras oraciones para ser liberadas; se les han
agregado muchos años a sus sentencias de purgatorio debido a que no ha habido
nadie quien rece por ellas o quien haga actos de penitencia, de reparación por
ellas.
"Habéis
tan pocos entre vosotros - y esto Yo lo aplico a Mi clero:
Tenéis hermanos en vuestra vocación quienes han sido olvidados.
¿Habéis tan pocos de vosotros que les dais el bálsamo - las aguas de
caridad de vuestros corazones, vuestras oraciones - para regad los labios
sedientos de aquellos quienes sufren en el purgatorio?
¡No! Preferís desechar
este conocimiento. Ya no reconocéis
el pecado, porque se ha convertido en un camino de la
vida sobre la tierra.
"A
no ser que restauréis Mi Casa, Mi Iglesia, a su gloria antigua, vuestras
puertas se cerrarán, vuestro clero será perseguido, y solamente unos cuantos
quedarán. ¿Es esto lo que deseáis,
vosotros quienes os asociáis y tratáis de formar una iglesia socialista sobre
la tierra? No hay ángeles construyéndola
con vosotros; si no los demonios.
"Hijos
Míos, todos vosotros mantendréis una vigilia constante de oración en vuestras
casas, en vuestras iglesias. Los
enemigos de Dios se están multiplicando.
"Muchos santos os fueron enviados en el pasado para ayudaros y advertiros de estos tiempos presentes en que vivís. ¿Pero quiénes hicieron caso de su consejo? Y ahora Mi Madre va por el mundo, y ¿quiénes atendieron Su consejo? ¿Por cuánto tiempo creéis que Yo permitiré que La difaméis? Yo no permitiré por mucho tiempo más que Mi Madre sea despreciada por vosotros.
Jesús
- "Hijos Míos, Yo pido almas víctimas.
Os pido como vuestro Dios, penitencia y expiación.
Evitad las ocasiones de pecado.
Proteged a vuestros hijos. El
tiempo dado en oración y penitencia, la unidad de la familia deberá quedar
intacta.
“Removed
de vuestros hogares literatura diabólica.
Es una abominación en los ojos de vuestro Dios que padres de familia
tengan pornografía en sus hogares. Ellos
distorsionan las mentes de los jóvenes y les cierra el Reino del Cielo a ellos;
las puertas se mantienen cerradas.
"Penitencia
será enviada sobre el mundo. En la
misericordia del Padre Eterno una penitencia pesada será enviada sobre muchos.
"Hijos
Míos, antes de terminar la batalla de los espíritus, vosotros reconoceréis el
valor del sufrimiento. Si no os ponéis
de rodillas ante vuestro Dios, seréis llevados de rodillas a la fuerza.
¡Clero! ¡Laicos!
¡Seréis llevados a vuestras rodillas a la fuerza!
"Mi Madre ha estado viniendo como una Mediadora entre Dios y el hombre. Ella os envía y esparce muchas rosas entre vosotros. Muchas tienen espinas; las espinas siempre están con las rosas. Y siempre encontraréis, hija Mía e hijos Míos, la cruz debajo de las rosas. El camino al Cielo es el camino de la cruz. Levantad vuestra cruz y seguidme. El camino es angosto, y muy pocos se mantienen sobre él. Muchos son los llamados, pero muy pocos los escogidos.
"Manteneos
firmes, hijos Míos. Fidelidad.
Manteneos fieles y verdaderos y os seréis salvados."
Verónica
- Ahora Jesús coloca Su mano enfrente de Él, así, y hace la señal de la cruz:
En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
Nuestra
Señora desciende detrás de Jesús. Yo
no me había dado cuenta que Ella estaba de pie arriba en el cielo.
Y Ella está de pie. Ahora
Ella cruza al lado derecho de Jesús, y Ellos ahora cruzan el cielo a nuestro
lado izquierdo.
Jesús
sonríe... muy bellamente. La luz es tremenda; es tremendo tratar de ver directamente a
la luz. Y Jesús se inclina hacia
adelante ahora y hace la señal de la cruz:
En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Ahora sonríe Nuestra Señora, y Ella asienta con Su cabeza a
Jesús, y Ellos cruzan el cielo.
Ahora
yo puedo ver que San Miguel - no lo había visto antes, porque la luz es tan
fuerte; no lo había podido ver de pie del otro lado del cielo.
Él cubre todo el lado izquierdo del cielo.
Sus alas, ahora están por alguna razón están extendidas.
Y sí tiene alas; son tremendas. Yo
las llamo alas, pero no he encontrado una palabra más bella.
Son muy suavecitas. No hay
otra manera cómo lo podría explicar. La
palabra "alas" no explica qué es lo que San Miguel tiene en su
espalda. Son bellas, suaves, oh,
como sin peso. No lo puedo explicar.
Ahora él tiene - San Miguel tiene puesta una túnica larga, blanca.
Pero, ay, ¡es enorme!
Nuestra
Señora y Jesús han llegado a - Su lado izquierdo, nuestro lado derecho, allá
por los árboles. Y Jesús se
inclina y hace la señal de la cruz: En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
Jesús
gira hacia Su lado derecho, y Nuestra Señora Lo sigue.
Ahora Él asienta con Su cabeza. Están
casi en el centro del cielo ahora. Están
de pie allí ahora y Jesús mira y asienta con Su cabeza.
Jesús
- "Hija Mía e hijos Míos, continuaréis ahora con vuestras oraciones de
expiación.
"Verónica,
hija Mía, Mi Madre te dará instrucciones en tu casa.
No saldrás a menudo de tu casa, hija Mía.
Tienes que aceptar la cruz que Nosotros te hemos enviado."
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Revised: March 27, 2010